Being Patient
Las investigaciones sugieren que las caídas pueden ser un indicador precoz de demencia, que a menudo precede a otros síntomas cognitivos. Los cambios en el cerebro, sobre todo en las áreas que controlan el equilibrio y la coordinación, pueden producirse años antes de que se manifiesten los problemas de memoria. La vigilancia de estos signos precoces podría conducir a un diagnóstico y una intervención más tempranos, lo que podría mejorar la situación de las personas con riesgo de demencia. Reconocer y abordar estos cambios sutiles en la movilidad y el equilibrio es crucial para una atención y un apoyo proactivos.
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